CONSIGUE UN AÑO SABÁTICO

Todos necesitamos, al menos una vez en la vida, un año sabático para huir de la rutina y ver el mundo desde otra perspectiva. La vida no está hecha para trabajar y vivir en un único lugar, así que empieza a ahorrar para tomarte unas semanas, unos meses o algún año de aventuras antes de decidir qué hacer con tu vida.

 

1. Gana dinero

Ganar dinero es sinónimo de trabajar, así que cuanto más trabajes, más dinero ganarás y, por lo tanto, más podrás ahorrar. Pídele a tu jefe ampliar tu horario, busca más trabajos, trabaja los fines de semana (lo cual te vendrá bien para ahorrar como verás en el siguiente punto). En definitiva, haz lo que sea por tener más ingresos y poder ahorrar el máximo posible.


2. Reclútate socialmente

¡No! No te tienes que encerrar y volver antisocial, pero haz más uso de las redes sociales y de tu casa que de los bares, pues te saldrá mucho más rentable. Invita a tus amigos a ver una peli o a cenar, siempre es mucho más barato que ir al cine o a un restaurante.


3. Vuelve a casa

Por muy duro que sea, tienes que volver a casa durante este tiempo. Incluso si tus padres te piden algo de dinero, será mucho menos que lo que gastes estando independizado. Además, con un poco de suerte tendrás una “chacha” en casa.


4. Negocia gastos

Apunta todos los gastos mensuales que tienes y cuando pase el mes intenta recortar lo que puedas. Por ejemplo, tu salud estará de acuerdo en que puedes ir andando o en bici a muchos más sitios de los que crees. Ahórrate ese combustible y gánatelo en salud.
Además, ¿para qué te guardas tantas cosas que no utilizas? Lo que para ti no sirve, puede ser muy valioso para otros.


5. Pide dinero

Ha llegado el momento de decir “no” a los regalos en ocasiones especiales para dar la bienvenida al dinero (que te hace más falta).